Burger Food Porn

Hoy os traemos un análisis super curioso de una de las «Grandes» hamburgueserías de Sevilla. De las que tienen autoestima y tiene el ego alto. ¿Será para tanto? Lo veremos a continuación.

Empezamos. Este viernes el señor Migue y el que escribe fueron al barrio de los Bermejales en Sevilla, donde se ubica la hamburguesería. Eran las 2 y 40 de la tarde y aquello estaba en efervescencia. Todos los bares estaban hasta la bandera y la gente se tiraba a la calle a por un rayo de sol como lagartijas panza arriba. En la avenida había dos descampados uno al principio y otro al final, por ello aunque había mucha gente, aparcar no fue difícil. Tuvimos una situación curiosa porque se nos acercaron dos «Bobbys» a pedir el consiguiente dinero, y de paso nos pidieron para un bocadillo y si le podíamos prestar el  «Gato del coche». Ya me veía el coche de Migue sobre 4 ladrillos jejejeje. Bueno eso quedó como algo curioso, pero nada más. Andamos por la acera y llegamos al restaurante / bareto / foodtrack. A ver, restaurante no era (Lo que conocemos como restaurante), porque el local era pequeño con mesas sin glamour mucho más cercano a un bareto típico. Como he leído en algunas de sus reviews de TripAdvisor son una especie de síntesis de los camiones de hamburguesas americanos, hamburguesa buena, pero sin servicio.. lo típico de los yanquis que comen en la calle. Vamos a poner en situación:

El local

Como se puede ver, es un local pequeñito, cual bareto normal, que ocupa toda la acera. En principio, el local no impresiona ni suma puntitos tan necesarios para las altas notas, pero bueno, hemos venido a comer. Llegamos algo más temprano de nuestra reserva y el camarero nos acomodó en una mesa de fuera que fue un poco incómoda porque estaban pasando constantemente personas por delante y detrás. Tampoco es para tanto, pero a veces la tranquilidad y el confort se echa de menos. Habíamos leído críticas al camarero y su falta de respeto, en nuestro caso, no hubo nada de eso, aunque hay que admitir, que ese chaval tiene pocas ganas de vivir. Era más seco que un bocadillo de polvorones, y aunque no hay queja al respecto, creo que ni nos miró cuando nos cogió nota, y no dijo absolutamente nada más que ¿Qué os pongo? Ok, Ok, y ya. Sin embargo cuando fuimos a pagar, nos cobró uno de los cocineros (En la foto sale en la cocina desde luego) y ese nos contó algo sobre la salsa que más adelante pondré. Ese si tenía vidilla y se agradeció.

El local por dentro

Como se puede ver, el local es sencillamente «Correcto». Nada de decoración característica, o mesas y sillas más especiales. Vamos aquí dentro no apetecía estar, la verdad, con el solito que hacía fuera y por supuesto la nula ambientación interior, mejor modo lagartija. Pero como digo, son datos más secundarios. Hasta este punto, Migue y el menda lerenda no estábamos impresionados para nada, habiendo ya visitado hamburgueserías con unos diseños muy chulos y vistosos.

La filosofía de la empresa

Esta pegatina en la pared parece representar el espíritu del local. Nada de glamour, como una foodtrack americana. Quizás era lo más llamativo de la decoración interior. Y oye, la idea puede estar bien, pero ojo, no cojas lo mejor de esto y se te olvide lo peor. A partir de aquí todo fue como una montaña rusa, cosas buenas y malas.. veamos.

Una vez sentados mi compi pidió. ¿Qué? Pues si, Coca Cola, como siempre y yo agua. Y aquí empieza lo malo. A ver como lo digo. NO, señores, NO, no puedes tener los precios que tienes (Más adelante en detalle) y tener un TAN MAL SERVICIO. Para empezar el servilletero era un manojo de servilletas con un cuchillo encima. ¿What?

Si, este es el servilletero…

Podría pasar si fuese el local de barrio donde comes por 10€ pero NO, ya veréis por que. Bueno, una vez visto esto, pensamos. ¿Un cuchillo para dos en época covid? ¿Pero que coño? (¡Ostras! se me olvidaba que es nuestra web y no hay censura) Un mojón pa ti. ¿Cómo nos puedes tirar un chorro de servilletas así sin más? Al menos eran servilletas de las que si secan y limpian, pero vaya presentación penosa. Y ahora viene lo mejor: ¡NO NOS PUSIERON CUBIERTOS!, Si, si como lo digo. Las patatas comidas con las manos. (COVID…¿Lo he dicho ya?). Me parece que no es la forma. No nos parece bien para el precio que tiene porque es una hamburguesería CARÍSIMA y por lo que pagas esperas un mínimo de servicio y mimo. Espera, espera, que aun queda lo mejor: VASOS DE CARTÓN. Si, de lo de festivales cutres. Si, de esos. Y tu dices, bueno: «Si te ha costado la Coca-Cola 60 céntimos y el agua 50, pues mira.» ¡NO! 1,80€ una botella de agua chica. La que vale 33 céntimos.. SI. Precio hinchado por las bebidas hasta decir basta. Normalmente 1,5 litros de agua cuestan 1,50€ y ya sabéis que siempre bebo agua en los análisis.

Esto es cutre…

Por eso digo que si todo costase poco, entendemos el escatimar en gastos, pero es que cada hamburguesa cuesta !16 PAVOS! Al menos la que elegimos nosotros. Pero oscilan entre los 12 y 16€ así que baratos, no son. Y ahí estábamos nosotros, flipando en colores, diciendo ¿Pero como va a ser esto, mesa cutre, sin cubiertos, con vasos de mierda, con un chorro de servilletas tiradas y las bebidas cobradas a precio de Bacardi 12 años?. La primera sensación era negativa, porque además de tener un buen producto hay que cuidar esos detalles cuando piensas cobrar un precio alto por el servicio.

Mood

Otros detalles que van bajando puntos por cutres son la carta que no tiene entrantes, y solo tiene un postre, y está cortita con sifón, pero bueno, podemos pasarla pensando que solo se dedican a 8 hamburguesas.

La carta… entre los 12 y los 16€

Como podéis ver la Burguer Foodporn lleva 3 asteriscos y son 220 gramos de buey certificado y con cositas muy ricas y apetitosas. La salsa patentada se llama Mayo secreta y tiene una pinta increíble, pero lo del código QR es de tener poco mimo. Ni cuidado al recortar una cinta de embalar. Y aquí podéis verlo. Te sientas en la mesa y ves esto y ya piensas que no han cuidado lo más mínimo la presentación y el mobiliario.

¿Elegancia? ¿Donde?

Venga va, vamos a centrarnos en la comida,  a ver que tal sale, dado que realmente hemos venido por esto, y no por las servilletas. En esta ocasión pedimos la Burger Food Porn como el nombre de la empresa, la cual tiene un precio de 16€. Así que aspiramos a lo más alto. Por eso decimos que hay que cuidar esos detalles cuando la cuenta pasa de los 40€ para dos personas porque por ese dinero tienes restaurantes de calidad y con el servicio excelente, ambientación perfecta, etc.. como por ejemplo la MAFIA. Y aquí vienen de nuevo curvas. Cómo decía nuestro amigo Jacobo. ¿Cómo podéis hacer lo difícil bien y lo fácil mal?

La hamburguesa. Llegó a la mesa y la pinta era inmejorable, patatas artesanales, pan personalizado bien tostadito por abajo, presentación excelente. Y nos dispusimos a probarla. Fotito va:

Que buena pinta.

Primer bocado y el negrote y yo nos miramos. Estaba riquísima. La carne sabía a carne (Estaba algo fría la verdad) pero el conjunto era sabroso, nada seco, con un punto picante que es parte de la receta patentada de 18 ingredientes que en breve comercializarán (Nos lo contó el cocinero cuando fuimos a pagar). Todo funcionaba en ella, desde el Bacon, al pan crujiente, a las patatas. El queso era intenso de textura sedosa. El pan acompañaba con un sabor dulzón. Todo el bocado se deshacía en la boca en una explosión de sabor: ME CAGO EN TU CASTA FOOD PORN. ¿Cómo me haces una hamburguesa así y no me pones ni cubiertos ni cubres los detalles? Es que da hasta coraje. De hecho pensad que no hacía falta ni beber para tragar tras unos bocados, porque estaba todo tan sedoso que se deshacía sin apenas esfuerzo. Se nos hizo corta la hamburguesa (También es verdad que no teníamos entrantes). Eso si, las patatas con los dedos. ¡MUY MAL!

Tenedor-dedo

Cuando abrimos la hamburguesa, pudimos ver la disposición de los elementos, y se veían de buen nivel, y la verdad es que la hamburguesa era de calidad. Al Cesar lo que es del Cesar. Hice la prueba de morder la hamburguesa sin la carne, y pasó la prueba con nota. El alma era esa carne de buey. Para mi gusto personal, el pique que se te quedaba en la puntita de la lengua se lo habría reducido (Era por la salsa), pero entiendo que ya es para gustos. En cualquier caso, había calidad. Productos de altísimo nivel, carne espectacular, que además hay que añadir que el camarero nos comentó al traernos las bebidas que la carne por dentro estaría poco hecha porque la hacen de una forma que es como vuelta y vuelta. Vamos, nos advirtió, y eso fue un buen punto. No tenemos problemas con la carne poco hecha, teníamos tanta hambre que, como si grita al morderla..

Ojito al pan tostado.

Nos acabamos la hamburguesa en unos cuantos bocados. Entraba como agua y fue unánime la opinión. Estaba buenísima y era un producto que cumplía con nuestras expectativas. No pega nada hacer tal hamburguesa y no acompañarla de un poco más de caché cuando cobras lo que cobras por ella, eso hay que decirlo de nuevo (Lo he repetido ya varias veces, cierto).

Como nos habíamos quedado con hambre nos pedimos el único postre que había: Tarta de queso. Nos trajeron un triangulito y de nuevo dos cucharas de madera de las de los palos de helado. Normalmente lo habríamos visto como un detalle de «Qué curioso» pero en este caso es porque aquí escatiman en lo que pueden. Os recuerdo que hasta este punto seguíamos comiendo con las manos ¿eh?

Si, esa madera que cuando la chupas o muerdes te da tirria infinita

La verdad es que estaba riquísima, de nuevo un muy buen producto. ¿Habéis probado el helado de chocolate del Mercadona ese que viene un litro en un envase rectangular negro? ¿Ese que comes y comes y comes y no llena y cuando miras, llevas media tarrina? Ese que gritas. ¡MAMA QUÍTAMELO QUE ME LO COMO!. Pues eso nos pasó con la hamburguesa y el postre. No caían pesados y volaron, y claro dos tiarrones hambrientos como nosotros no iban a dejar rehenes. El postre puso la guinda para cerrar la comida y nos quedamos perfectos para el cafelito. Hasta ahora recapitulando: Servicio pésimo, comida sobresaliente, precio excesivo.

Una vez con el ombligo para fuera y ganas de rodar más que de andar, pedimos la cuenta. ¿Cuánto sería la broma? pues aquí lo tenéis:

Son caretes ¿eh?

Me resultó curioso ese postre ¿A 5,50 o 6,50? Haciendo los cálculos resultó que era 5,50. Como veis pagamos 41 pavos por comer, lo que es una cifra alta para el poco mimo que se le puso en el servicio. Cuando estábamos tomando nuestro café en la sede donde hacemos las notas, vimos que no se iba a posicionar como TOP por estos fallos a nuestro juicio inaceptables. Si costase la hamburguesa 9-10€ y fuese tipo «Bueno, bonito y barato» pues puedes llegar a comprender y pasarlo, pero nos chocó tanto esa dejadez que le fue restando por todos lados a pesar de tener un producto sobresaliente. Y si, la hamburguesa es de las buenas, y de hecho es la primera que llega al 8. Es de una calidad excepcional y disfrutas cada bocado. Pero no puedes dejar todo el peso a la comida. Esta nota nos da coraje, porque estaba realmente buena, pero en restauración hay que cuidar los detalles porque la experiencia del usuario no solo es la comida, sino el confort, el trato, el precio justo y por supuesto lo que comes. Como siempre, esta es nuestra opinión subjetiva como catadores de hamburguesas y de locales especializados. Esperamos que os haya gustado y como sabemos que leeréis esto (Señores de BFP), poned atención a estos detalles y nos vemos en un futuro próximo ;).

Saludos a todos y recordad: Seguidnos en IG en @cazadoresdehamburguesas

PD: Migue esa mañana fue al gimnasio y yo por la tarde corrí 40 minutos., había que bajarlo.

Puntuación de Burger Food Porn:

Ubicación / Local : 5.8

Servicio y atención: 5.5

Comida: 8.05

Precio: 4.12

Nota final: 6.83

 

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